Rogelio López Cuenca Infiltrates [English & Spanish]
by Jorge Luis MarzoFiled under: Culture Jamming and Reality Hacking
Rogelio López Cuenca infiltrates
by Jorge Luis Marzo
At the World Expo 92 in Sevilla, Spanish artist Rogelio López Cuenca placed several signposts inside as if they were the official ones. What they were indicating had nothing to do with the real pavilions and itineraries. It took a while for real managers to realize. Some serious legal matters arouse.
In another “camouflage†project, López Cuenca surreptitiously placed another signpost in Porto (Portugal). What car drivers could see on it was something not very “welcoming†though. It took a while for traffic agents to realize.
[Español]
Durante la Expo’92 de Sevilla, el artista Rogelio López Cuenca colocó entre la señalética oficial del recinto, la que indica los recorridos o el emplazamiento de los pabellones y servicios, toda una baterÃa de pivotes y postes informativos, prácticamente idénticos a los oficiales. En ellos, no se leÃa la información al uso, sino iconos y flechas asociadas a palabras como “echargedeâ€, “esouslabanalâ€, “geles†o “enzametaâ€. En donde la dirección de la Expo vio desconcierto y confusión, y por tanto la razón lógica para la suspensión del proyecto, el artista veÃa la posibilidad de atajar la proposición mecanicista de un orden informativo al servicio de una visión del evento y del mundo en clave de mapa. El cortocircuito de ese mapa podÃa comportar una cierta paralización de las estrategias polÃticas que lo habÃan dibujado. En otra ocasión, López Cuenca colocó una señal a la entrada de Oporto, una de esas señales informativas de tráfico en las que casi nadie pone el ojo: ahà estuvo algunos dÃas, hasta que fue retirada. En ella, aparecÃa el pictograma de un policÃa con la porra levantada y con la clara intención de repartir leña, en fondo azul, enmarcado por las estrellas de la Unión Europea y con un eslogan que rezaba: “Bienvenidosâ€. ¿Qué comentarios harÃan los conductores que se fijaran por casualidad en esa señal? ¿hasta qué punto descartarÃan que la señal fuera oficial? Las posibilidades de realizar un “bypass†a los códigos que consideramos naturales o apropiados pueden ser muy ricas y sabrosas.